Por desgracia el tiempo nos está dando la razón a quienes vaticinábamos malos tiempos para la fábrica de cementos en Puerto Sagunto. Pasan los meses y el gobierno municipal con Compromís a la cabeza y su cohorte «progresista» de Podemos e Izquierda Unida no sólo mantienen su empeño de cerrar la cantera y con ella la fábrica, sino que ni siquiera se reúnen con la empresa para llegar a acuerdos.  Y por supuesto el alcalde ni se digna mirar a la cara a los trabajadores cuando acuden al Pleno o se manifiestan en actos públicos por el mantenimiento de los puestos de trabajo. Menos mal que son los de la participación ciudadana.

Curioso verdad, que los trabajadores tengan que defenderse precisamente de aquellos partidos políticos que dicen defenderlos y que anclan sus raíces (y una buena parte de sus votos) precisamente en estos ciudadanos. Ciudadanos que parece que para Compromís no son «persones», como rezaba su lema electoral.

Pues bien, estas personas, estos ciudadanos han tomado conciencia de que la obsesión (tozudez) de Kiko en cerrar la cementera les avoca a las listas del paro y han comenzado a movilizarse. Las pancartas lo dicen bien claro «No al cierre de Lafarge. Si al mantenimiento de los puestos de trabajo». Y deben proseguir mientras tanto el alcalde se empeñe en incumplir sistemáticamente la Ley. La misma que tanto esgrimen a su conveniencia si la causa es afín a su hoja de ruta. La misma que invocaba desde la oposición cuando el gobierno del PP incumplía los acuerdos plenarios. Ahora es él y sus palmeros los que incumplen y se niegan a cumplir el convenio aprobado en 2013 por el pleno municipal, respaldado por 18 de los 25 concejales y firmado por el consistorio y la empresa. Como también incumplen el acuerdo plenario del pasado mes de julio, para que en el siguiente pleno ordinario (septiembre), se llevara el expediente ya finalizado de cambio de planeamiento urbanístico, que supone el inicio de los trámites administrativos para la apertura de una nueva cantera en el Piñal, imprescindible si se quiere que cese la actividad en la actual cantera y siga la cementera en marcha con un suministro de materia prima (piedra caliza) garantizado.

Así que señor Fernández deje de marear la perdiz, cumpla ley y el convenio firmado, y de seguridad laboral a los trabajadores de la Lafarge.

Sergio Paz Compañ

Concejal del Grupo Político Iniciativa Porteña