La semana pasada participé en la manifestación de los trabajadores de BOSAL por las calles de Valencia, que concluyó con una reunión entre el Comité y el Conseller de Industria, Rafael Climent. Tras el encuentro, fue el propio Conseller quien se dirigió a los concentrados para hablarnos de sus “compromisos”.
Lo primero que aclaró, es que para el y su partido, lo más importante son las personas y que por lo tanto, estarían al lado de los trabajadores de BOSAL en esta difícil situación. Habló de su compromiso para redactar un Plan de Acción Social cuya fecha de finalización no podía decir con exactitud. Se comprometió a hablar con inversores que estuvieran interesados en la planta de Bosal para ponerla en producción y recuperar los puestos de trabajo. Y por último nos recordó que nuestro municipio es eminentemente industrial y también se comprometió a trabajar para conseguir que se ubicaran nuevas empresas en nuestros polígonos industriales.
Estamos viviendo un momento en el que los gestos forman parte del día a día de la política. Y eso fue ni más ni menos lo que vivimos, un gesto de apoyo que el señor Rafael Climent quiso adornar con compromisos, buscando el aplauso fácil entre los trabajadores de BOSAL. Seré el primero en felicitar a este señor y a su partido si cumplen con lo prometido ayer por la mañana, aunque a juzgar por el comportamiento de Compromis a nivel local, difícil lo van a tener para atraer inversores e industrias a nuestro Municipio. La actitud del Ayuntamiento con LAFARGE, es antagónica con lo planteado por el señor Conseller de industria. El Alcalde de Sagunto, se ha empecinado en cerrar la cantera de donde se suministra LAFARGE y con ello, está condenando a muerte la actividad de la empresa y los cientos de puestos de trabajo que dependen de ella, saltándose el acuerdo plenario de hace tres años en el que se firmó el convenio de colaboración con la empresa. La inseguridad y falta de seguridad jurídica, provoca que la imagen que se está dando de este Municipio, sea una invitación para no acometer inversiones en nuestros polígonos.
Por ello, es necesario que nos concienciemos de que la situación de nuestra industria es de extrema gravedad. En la reconversión industrial, casi toda la actividad giraba en torno a los Altos Hornos y la lucha implicó a todo un pueblo. Ahora los conflictos que se plantean son de pequeñas y medianas empresas con lo que las movilizaciones cuentan con menos apoyo. Tenemos que ser capaces de concienciarnos de que la batalla que están librando los de BOSAL o la que pronto iniciaran los trabajadores de Lafarge, es una cuestión que nos atañe a TODOS. Solo así conseguiremos la suficiente transcendencia en nuestras acciones reivindicativas.
Queremos que nuestro Municipio sea Zona de Preferente Industrialización, pero no basta con hacer declaraciones políticas, pues ese honor nos lo tendremos que ganar desde la reivindicación. Defendamos lo que tenemos, y a partir de ahí, favorezcamos la implantación de nuevas industrias. Por eso es necesario que el actual equipo de gobierno se de cuenta de que va mal por el camino de cerrar Lafarge. Y para que se de cuenta el señor Alcalde, el pueblo tiene que apoyar a los trabajadores de esa empresa en su futura reivindicación, ya que no es solo el futuro de una empresa, es la supervivencia de un modo de vida lo que nos estamos jugando todos los ciudadanos de El Puerto.
Pero quiero ir un poco más allá. Es necesario interconectar todos los pequeños conflictos y afrontar la falta de inversiones en nuestro pueblo, con un frente común. Espero que los agentes sociales se den cuenta del difícil momento en el que nos encontramos. La próxima movilización debe contar con la participación de los afectados de GALMED, BOSAL, TUMESA, LAFARGE… y todos aquellos que de una manera u otra han sido sacudidos por la crisis y el mercado global. Queremos que Parc Sagunt o Camí la Mar, se colmaten de empresas; que se lleven a cabo las infraestructuras y accesos logísticos a nuestro Puerto Comercial o que se mejore el trazado ferroviario con Aragón.
Estamos ante un objetivo común en el que hay enemigos y obstáculos diversos. Solo nuestra determinación nos hará superar esta dura prueba a la que se está enfrentando El Puerto.
Manuel González Sánchez
Portavoz del Grupo Político Iniciativa Porteña
