EL LARGO EXILIO DEL ARCHIVO HISTÓRICO MINERO-SIDERÚRGICO – Sergio Paz (Concejal de Iniciativa Porteña)

  ___
___

  Estos días atrás leía con agrado la noticia de la visita del Concejal de Patrimonio (lo de Industrial lo borró del mapa el tripartito) a un almacén de Picassent. Aquí es donde se encuentra desde hace varios años, depositado y custodiado por una empresa especializada, el Archivo Minero-Siderúrgico rescatado de las antiguas oficinas de Altos Hornos, desde que comenzó su remodelación.

Y digo agrado, porque me congratuló el interés mostrado por el edil Abelleira por esta joya de nuestra historia. En la nota de prensa mostraba su preocupación por el estado del archivo y buscar la mejor solución para su traslado, de vuelva a su origen. Leyendo esto uno podría pensar que algo está cambiando.

Sin embargo, mi sorpresa fue mayúscula cuando la nota de prensa del ayuntamiento, afirmaba que la empresa depositaria del archivo se había dedicado estos años a la organización, documentación y digitalización del mismo, algo que es absolutamente falso. El almacén de Picassent es un simple depósito de documentación.

Engañar de esta forma a la ciudadanía no parece un buen ejemplo de transparencia, más bien es un vano intento de mostrar un falso interés por el Patrimonio Industrial, en uno de los legados más sensibles, pues aquí está recogida, entre otras cosas, la vida profesional de nuestros antepasados más cercanos. Sinceramente esta mentira me ha molestado mucho, personal y políticamente.

De todas formas, si el Concejal Abelleira quiere trabajar esta parte del Patrimonio, y dejarse de palabrería para pasar a los hechos, primero ha de ponerse en contacto con la Fundación de Patrimonio Industrial, garante de la conservación del Archivo, pero sin recursos para acometer este y otros cometidos; sus responsables, conocedores de primera mano del contenido de este Archivo son los que mejor pueden informarle del contenido y valor del mismo, y son los que deben tomar la decisión de su traslado y futura ubicación, siempre que encuentren la colaboración necesaria, entre otros del ayuntamiento.

Desde mi punto de vista, la Nave de Talleres (hoy día en desuso) y previo acondicionado un espacio exprofeso, podría recibir este legado y servir no sólo como depósito gratuito (no tendríamos que pagar alquiler), sino también como lugar de trabajo para el necesario inventariado y catalogación. Este ingente trabajo requiere de un experto profesional documentalista que debidamente auxiliado podría realizar un magnífica labor. Las becas que la Diputación y el Ayuntamiento saca cada año podrían muy bien emplearse para este fin.

Veremos pues si el Archivo vuelve a casa o sigue su largo exilio en un triste almacén.

Sergio Paz Compañ

Concejal de Iniciativa Porteña

Facebook
Twitter
LinkedIn

Un comentario

  1. Por favor de una vez por todas aver si se preocupan un poco por las 500viviendad no tenemos de nada tenemos aqui un local que se supone seria un centro de jubilaos ya llevamos 6años y nadie se preocupa del tema ustedes y el resto de politicos nos estan tomando el pelo el baladre tiene de todo aqui habiendo mas personal no tenemos de nada

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *