Llevo unos cuantos años como socio del CD Acero, no tantos como me hubiera gustado, pero los suficientes como para mantener ese número 60 entre los asociados de la entidad. Los acontecimientos que se han sucedido durante esta temporada dejan al Club al borde del precipicio, con una nueva junta directiva en la que los puestos de presidenta y vicepresidente han sido ocupados por personas que no parecen conocer demasiado bien la identidad e importancia de este club para El Puerto.
Ver el estadio Fornás con tan poco público en los encuentros del grupo VI de la tercera división en el que se encuentra encuadrado el equipo porteño, me entristece, pues me vienen a la cabeza otros momentos muchísimo más brillantes, en los que nuestro pueblo se volcaba con el Acero. No se me olvida aquella eliminatoria con la Real Sociedad, año 1978, en la que el Fornás registró un lleno histórico, en una memorable victoria de los nuestros por un tanto a cero. Luego cayeron en San Sebastián, pero lo hicieron con la cabeza bien alta.
Ver lleno el Estadio del Fornás, es algo que emociona. En la promoción de ascenso a segunda B, en 1996, nuestro equipo quedó encuadrado en un grupo con el Palamós, el Atlético Baleares y el todopoderoso Murcia C.F. El CD Acero con un equipo repleto de jugadores de la cantera plantó cara a todos sus rivales y solo perdió un encuentro. Memorable el partido jugado en casa ante el Murcia, con empate a cero, pero que nos hizo sentirnos muy orgullosos a todos los asistentes al encuentro por la entrega de los nuestros. Eran momentos de épica, que ahora se echan de menos.
Pero si nos vamos más atrás, el CD Acero ha sido santo y seña de El Puerto, desde su fundación en 1919, al igual que el Valencia CF fundado el mismo año, siendo uno de los clubes con mayor antigüedad de España, el número 60 en el ranking de antigüedad (como mi carné de socio). El estadio Fornás fue inaugurado en 1929, y ha sido objetivo de la especulación inmobiliaria, pues hubo intentos de construir en ese espacio en 2005 y en 2010, intentos que fueron paralizados por Iniciativa Porteña que además forzó una importante inversión con la que el estadio consiguió la imagen que tiene hoy en día.
El caso es, que, hasta la fecha, el CD Acero y su estadio han formado parte de la historia de El Puerto, cuestión que parece que muchos han olvidado. Por eso, desde estas líneas me gustaría hacer un llamamiento a la reflexión de todos esos aceristas de corazón que, por distintos motivos no forman parte de la familia rojiblanca, de todos aquellos que han jugado en el club y que desde hace tiempo no pasan por el campo, de aquellos que, por enfados con las directivas o porque sus hijos no jugaron en el equipo de sus amores, abandonaron el club, en definitiva es una llamada de socorro porque realmente veo a nuestro Acero muy tocado y muy necesitado de ese amor a nuestro pueblo que en este caso y muchos otros, echo en falta entre los porteños y porteñas. Es momento de dar un paso adelante, por El Puerto, por el CD ACERO.
Aúpa Acero¡¡¡