El restaurado teatro de la Escuela de Begoña alberga en su interior una auténtica joya. Se trata del piano de gran cola Steinway and Sons, una de las marcas más prestigiosas del mundo, casi una pieza de museo por su valor como instrumento musical único, por su calidad instrumental y por su azarosa historia.
Empecemos por acercarnos a su singular vida. Parece ser que fue construido en Nueva York en el año 1878, y que perteneció a la regenta María Cristina, viuda de Alfonso XII. Posteriormente fue comprado por una naviera de transatlánticos, para amenizar al pasaje, navío que naufragó en las costas levantinas. Fue rescatado del naufragio y restaurado, cambiándole los componentes necesarios. Posteriormente se puso a la venta, siendo adquirido por la dirección de Altos Hornos, que lo ubicó en el colegio Mª Inmaculada de Puerto Sagunto. Construido el colegio Nuestra Señora de Begoña, el piano se instaló en la parte izquierda mirando al escenario, protegiéndolo con una funda acolchada. A finales de los cincuenta del siglo pasado se formó el coro infantil del colegio, que ensayaba las piezas musicales en el escenario del teatro o salón de actos del colegio, acompañado por la música del piano de gran cola.
Aquí le llevó una de sus mejores épocas, pues las sabias manos de D. Vicente Sanjosé no solo acompañaron la educación musical de varias generaciones de niños porteños, sino que además supo cuidar y mimar esta joya, buen conocedor de su valía. Pero esta etapa no estuvo exenta de sobresaltos, pues es cedido por la dirección de Altos Hornos para un concurso de canto en la playa de Pobla de Farnals, sufrió un grave accidente al izarlo para colocarlo en el escenario, rompiéndose el pedalero, la pata de atrás y agrietándose por varios sitios, perdiendo hasta la funda, lo cual lo inutilizó durante algún tiempo.
Mientras Don Vicente lo cuidó, se reparó en dos ocasiones y hasta 1983 dio buen servicio. Pero el cierre de Altos Hornos y los difíciles tiempos que siguieron, unido al paso del tiempo, la desidia y la ignorancia hicieron mella en él. Abandonado el teatro del colegio, el piano corrió similar suerte, siendo literalmente abandonado y olvidado en los bajos de una escalera del ayuntamiento.
Afortunadamente cuando se emprendió la rehabilitación del teatro, tras innumerables años de abandono y promesas incumplidas, en el año 2.007 la Conselleriade Cultura tuvo a bien rescatar y restaurar el piano. Su restauración corrió a cargo de la empresa Clemente Pianos y costó la importante cifra de 30.050 €. Finalizada la misma volvió de nuevo a su teatro de Begoña, en donde se le construyó un habitáculo especial a la derecha del escenario para ser guardado y protegido de la mejor forma posible. Y no sólo eso,la Conselleria yla Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio Nuestra Señora de Begoña firmaron un documento por el cual éstos se comprometían a la custodia y cuidados necesarios para el adecuado mantenimiento del piano en las instalaciones del teatro de Begoña, de donde no debería salir. Hay que entender que se trata de un instrumento musical de gran valor, que se debe cuidar y proteger como cual tesoro en un museo; y por tanto, para deleitarnos con su sonido debemos acudir al teatro, sin más traslados que lo dañen irreversiblemente.
Y eso es precisamente lo que han hecho y siguen haciendo desde esta Asociación de Begoñeros, pues los cuidados y mimos que brindan a este a pieza museística y musical inigualable son exquisitos. Cada vez que hay una actuación, manos expertas se encargan de afinarlo y dejarlo a punto para el concierto, traduciéndose en un deleite para los sentidos, pues este piano como cualquier entendido en música sabrá, sólo puede ser tocado por pianistas profesionales que sepan sacar el alma musical de esta especie de joya de la corona de nuestro Patrimonio Industrial. Así pudimos disfrutar de él en conciertos y actuaciones organizadas por Amaranto Cultural y como no porla Asociación Begoñera, como la que tuvo lugar el pasado 30 de noviembre.
Podemos considerarnos afortunados de tener en nuestra localidad este magnífico piano, por su calidad y su historia, pero también tenemos la gran responsabilidad de asegurar y posibilitar su conservación, cuidado y salvaguarda para que la historia no se repita. Y como no, podemos sentirnos orgullosos de poder disfrutar de los conciertos que manos expertas nos brindan a la población en general. Eso es algo que de momento lo está llevando a cabo y a la perfecciónla Asociaciónde Antiguos Alumnos de Colegio Nuestra Señora de Begoña. Mi más sincera enhorabuena.
Sergio Paz Compañ
Concejal Iniciativa Porteña
Un comentario
Hola, …, para tu información: Parte de la historia que publicas NO es cierta y otra parte NO sabemos:
«Empecemos por acercarnos a su singular vida. Parece ser que fue construido en Nueva York en el año 1878, y que perteneció a la regenta María Cristina, viuda de Alfonso XII. Posteriormente fue comprado por una naviera de transatlánticos, para amenizar al pasaje, navío que naufragó en las costas levantinas. Fue rescatado del naufragio y restaurado, cambiándole los componentes necesarios. Posteriormente se puso a la venta, siendo adquirido por la dirección de Altos Hornos, que lo ubicó en el colegio Mª Inmaculada de Puerto Sagunto»
Lo que sabemos cierto y comprobable: El piano fue construido en Hamburgo por S&S y entregado a CASA CAMPOS (Madrid) en 1919. Por el nº de serie la CENTRAL S&S de NY así lo certifica (tenemos documentacion que lo acredita). Las fechas no encajan. Del resto (Casa Real, compra por la naviera, etc…) solo tenemos comentarios de tercera o cuarta mano. La historia es muy bonita pero no se puede asegurar que sea cierta.
NOTA.- Soy EX alumno de Begoña y me crié con ese piano y con D. Viente Sanjosé.
Saludos!!!