En el  pleno donde se resolvieron por parte del equipo de gobierno las alegaciones presentadas por los portavoces de los grupos de la oposición y la Vice interventora del Ayuntamiento, el concejal de Compromis, señor Ariño, se quejó de las “las formas” empleadas para la presentación de las alegaciones, el último día hábil y por correo ordinario.

  Al parecer, no entienden los del equipo de gobierno, que los trámites reglamentarios permiten unos plazos y unas formas de notificar, cuestiones legales a las cuales nos hemos ceñido los grupos de la oposición. Sin embargo, ellos no han seguido los trámites que marca el procedimiento administrativo, cuestión por la que han tenido que celebrar un nuevo pleno para intentar cerrar la vía de agua abierta por su mala gestión en la tramitación del presupuesto. Fueron advertidos por el Interventor y no hicieron caso, en una nueva muestra de soberbia, que ha retrasado la aprobación definitiva del presupuesto para este año.

  Pero ya que nombró el delegado de hacienda “las formas”, quiero dejar bien sentado que en este aspecto, no será su grupo o el equipo de gobierno el que nos podrá dar lecciones al resto. En el presupuesto, no han admitido las correcciones planteadas por la oposición, e incluso en una de las comisiones informativas desde Iniciativa Porteña lanzamos una serie de propuestas de inversión, que no fueron recogidas; recuerdo que le dije al señor Ariño que no merecía la pena que me esforzara en lanzar ideas porque no me iban a hacer ni caso, a lo cual el me espetó: «ya sabes lo que es esto, estamos en mayoría absoluta y es lo que hay»

  Realmente hay detalles que explican cuales son “las formas” de cada uno. Otro ejemplo lo he vivido esta última semana; el martes se celebraban comisiones informativas, el miércoles pleno extraordinario y el jueves Junta de Portavoces, todo ello en turno de mañanas. La duración del Pleno o la Junta son lo de menos, sobretodo cuando un servidor trabajaba en turno de noches y de una manera u otra, para poder asistir era necesario dormir previamente. Por este motivo, les pedí que adelantaran la Junta de Portavoces al miércoles para antes o después del Pleno, con el objeto de concentrar estas cuestiones en una sola mañana. Les costó contestar, pero dada mi insistencia en el grupo de whassap de portavoces, en esta ocasión quien habló fue Pepe Gil: «Manolo, de moment les convocatòries es queden tal y com están fetes»

  Está claro que todos tenemos obligaciones, pero soy el único portavoz que no tiene la condición de “liberado”, por lo que un mínimo de miramiento deberían tener, máxime cuando los otros dos grupos de la oposición, no pusieron ningún reparo a mi petición. Así las cosas, decidí abandonar el grupo de whassap, pues no tengo porque estar con personas que no respetan al resto y que actúan así sin tener razones justificadas. Este tipo de cuestiones son repetitivas en determinadas convocatorias, por lo que ya no me sorprende nada, pues parece que a algunos les divierte fastidiar al prójimo. Lo más sorprendente de todo esto, es que justamente el actual Alcalde, es el que más se quejaba la pasada legislatura por el horario de las convocatorias, e incluso la hora de la junta de portavoces se cambió a las ocho de la mañana de los viernes, para que le diera tiempo a llegar al instituto donde daba clases. Su mala fe es manifiesta, y su memoria también…

                                                                       Atentamente:

                                                                       Manuel González Sánchez

                                                                       Portavoz de Iniciativa Porteña